Un momento que marcó una generación… 🇮🇹⚽

Roberto Baggio, «Il Divin Codino», es una leyenda del fútbol italiano, conocido por su habilidad, visión de juego y su icónico peinado. Pero incluso las leyendas tienen sus momentos de dolor, y para Baggio, ese momento fue el penal fallado en la final de la Copa del Mundo de 1994 frente a Brasil.

La escena sigue viva en la memoria colectiva: en el estadio Rose Bowl de Pasadena, Estados Unidos, se disputaba la final de la Copa del Mundo. Tras un empate a cero en 120 minutos de intenso juego, la definición fue a penales. Baggio, que había sido una de las figuras del torneo con sus actuaciones estelares, se acercó al punto penal para tomar el que sería el disparo definitivo.

El silencio era absoluto, la tensión palpable. El mundo entero observaba. Baggio, con su característica calma, corrió hacia el balón… pero su tiro, en lugar de encontrar la red, voló por encima del travesaño. Brasil se coronó campeón, y Baggio, con la mirada fija en el suelo, se convirtió en el símbolo de una derrota agónica para Italia.

Sin embargo, el verdadero legado de Baggio no se define por aquel momento. Su carrera fue una sinfonía de genialidad en el campo, ganando la Bota de Oro en 1993, siendo un ídolo en clubes como Fiorentina, Juventus, Milan y más. Su estilo de juego, su ética de trabajo, y
su humildad ante la adversidad lo han convertido en uno de los jugadores más queridos y respetados de la historia del fútbol.


Aquel penal no define a Baggio; lo que define a Baggio es su respuesta ante la adversidad, su capacidad para seguir adelante y su imborrable contribución al deporte. El fútbol es un juego de momentos, y aunque este fue uno de sus más duros, también nos recuerda la humanidad detrás de las leyendas.

#RobertoBaggio #IlDivinCodino #US94 #LegendsNeverDie #FootballHistory

Por admin

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *